El Drago se considera, según una ley del Gobierno de Canarias, el símbolo vegetal de la isla de Tenerife. Agavácea muy decorativa por su aspecto exótico similar a una palmera. Su tronco ancho y de color pardo, que ramifica en altura, genera un porte muy llamativo. Su follaje de color verde azulado también resulta atractivo. En primavera produce flores amarillentas sin valor estético, seguidas de bayas naranjas en verano. Crece bien en suelos fértiles y bien drenados, en climas cálidos, aunque soporta heladas suaves. Suelen desarrollar varias cabezas a medida que van desarrollándose, sobre todo cuando florecen. Esta planta aunque es mediterránea es muy similar en su tratamiento a las plantas del desierto, salvo por su poca resistencia a las heladas.
El Ficus nitida se usa en jardinería como árbol siempre verde, de gran desarrollo con una ancha y densa copa. Su tronco es grueso, de corteza gris y aspecto liso, normalmente ramificado a partir de cierta altura. La emisión de raíces aéreas es una de sus características, colgando de sus ramas hasta llegar al suelo. Las podas, son una de las labores culturales más valiosas para mantener y controlar a esta planta dentro del volumen en el espacio deseado.
Arbusto caducifolio. Mide entre 3 y 5 m. de altura. Las ramas son largas y espinosas. Produce atractivas flores rojas y los frutos conocidos como granadas. De gran valor por su aporte a la salud, sus cualidades antioxidantes, antiinflamatorias y de agradable sabor dulce.
